Uno de los momentos más felices de mi vida fue cuando Jorge vino al hospital a conocer a Nico. Viví aquel instante con la sensación de que no podíamos ser más felices... Fue el mejor momento de mi vida y por eso quisimos repetir los pasos para cuando yJorge y Nico vinieran a conocer a su hermana.
Éste ha sido el ritual que nos ha funcionado para proteger ese momento y guardarlo en nuestra memoria sin agentes externos que lo condicionen:
1. Los hermanos vienen a conocer al bebé acompañados de su padre (en ambas ocasiones hubo alguien que los trajo al hospital y su padre bajó a buscarlos). En la habitación nadie esperando, sólo el bebé y yo. Tampoco vale que la familia espere en la puerta. Seguro que les harían algún comentario que podría enturbiar ese momento... Y lo queríamos lo más limpio posible! El bebé espera en la cunita y mamá se centra en recibir a los hermanos. La idea es que sean ellos los que muestren interés por buscar y ver al bebé. Por eso no les espero con el bebé en brazos. Y tanto que si mostraron interés por el bebé!! Casi se olvidan de saludarme!!!
2. Medallas de súper hermano mayor:
En esta ocasión, con los nervios de ponerme de parto, se me olvidaron las medallas. Pero siempre hay un par de amigas que te sacan de un apuro y lo hicieron genial!!!
Para los niños una medalla es un reconocimiento de algo importante. Han tenido medallas cuando han dejado el chupete o el pañal, cuando han sido los encargados de la clase... Es una forma de decirle al mundo que algo bueno está pasando! Una cartulina y una cinta son suficientes. Aquí están las nuestras:
3. Dejar que cojan al bebé, que le toquen.
Los niños tienen curiosidad por todo y querrán tocar al bebé, alucinarán con el tamaño de sus deditos, preguntaran por qué tienen los ojos cerrados y que es esa pulsare que les cuelga del tobillo... Es realmente gratificante verles juntos por primera vez...
4. Los bebés, en nuestra casa, traen regalos a sus hermanos
Esta idea la tomé prestada de una amiga no sin antes darle mil vueltas al asunto. La parte de introducir un factor económico e interesado en todo esto me tiraba para atrás, pero es verdad que, como funcionó con el nacimiento de Nico, lo hemos repetido ahora con el de Abril, por aquello de no cambiar lo que funciona. Es un detalle sin importancia pero ellos se van tan contentos a casa con el regalito que les ha hecho su nueva hermana...
Y vosotros, ¿cómo recordáis el momento en que presentasteis al nuevo miembro de la familia a sus hermanos?
