Disfrutaron mucho buscando flores "nuevas" y pude limitarles a que sólo cogieran una cada uno (si es por ellos me hacen un ramo gigante por el día de la madre!).
Una vez recolectadas todas las flores, hicimos la bolsa sensorial llenándola de agua y sellándola al vacío.
Creo que ésta es la bolsa que más le gusta a la enana (podéis ver el vídeo en nuestra página de Facebook) y es una forma sencilla y segura de que ella empiece a disfrutar también de la primavera.
Y aprovecho a pedirle a la primavera que se mantenga en esta versión de buen tiempo hasta que llegue el verano. Queremos jugar en el parque sin miedo a que los enanos sigan cayendo malitos, queremos tener que vaciar las zapatillas de arena antes de subir a casa, queremos que llueva pero que también salga el sol, para poder ver el arcoiris y saltar en los charcos!!!
Hasta la próxima!!
Precioooosa la bolsa, apuntada queda!!! Besicos playeros.
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